Lo verdaderamente importante de las tarimas exteriores es que se controle todo el proceso de fabricación propia "nacional", desde la importación de la madera, el secado de la misma (ya que es muy importante el secado para la estabilización de la madera y evitar los posibles movimientos por las cambios constantes de la temperatura), fabricación y posterior empaquetado.

El sistema de sujección de las tablas es tan importante como la calidad de la madera. Por eso en Jesús del Ser fabricamos nuestras propias grapas, ambos procedimientos (sistema de grapas y control de proceso de fabricación), nos permiten asegurar la gran estabilidad de nuestra madera, en cuanto a movimientos, por cambios de temperatura o por dilataciones. Es erróneo pensar que por que la madera este en el exterior no sea necesario el secado o la estabilización. Y también es erróneo comprar tarima con fabricación extranjera, ya que en otros países por el clima que tienen no es necesario secar la madera, con lo que si esta madera se coloca en España (clima extremo) seguramente nos dará problemas a los pocos meses de la instalación.

Las tarimas de madera para exteriores son ideales para la decoración de terrazas, jardines, piscinas y todo tipo de espacios sin necesidad de realizar obras engorrosas.

Permiten igualar las pendientes de los suelos sin modificar los niveles. El mantenimiento de estos suelos es mínimo.

La clave de una buena instalación está en el nivelado, disposición y fijación de los rastreles sobre los cuales va anclada la tarima.